¿Qué podría decir?

Quiero no escribir sobre mí misma. Mientras más lo hago, peor me siento. Cambian mis opiniones, se mezclan mi interior y no hallo el origen de mi ira. Me frustro. Me caigo mal, como siempre. No soy una persona con la que me gusta tratar. Y si lo fuera... mi mundo sería tan distinto. Tal vez escribiría sobre conejillos o fiestas, o algo así, más normal.
La normalidad... estereotipos, nada más. Pero no me gusta, no me gusta la normalidad, no me pertenece. Ser rara ni siquiera significa nada en el fondo. Me hace más solitaria. Sería tonto decir que soy una criatura que ama a la soledad como su máxima compañera. Sería mentira. Necesito... no a los normales, pero sí necesito a mis congéneres. Necesito que alguien logre demostrarme alguna vez que no soy tan ruin.
Creo que el mal punto es que realmente soy ruin. Miénteme, entonces, invéntate méritos para mí. Oh pero desconfío tanto... no sería engañada aunque fuera una mentira que realmente quisiera creer. Vuélveme crédula con tu voz, por favor...
Esto es una súplica que jamás será cumplida sólo por mis palabras antiguas y sepultadas....

No importa, de todas maneras, mentiré y diré que no importa.